La Costa Pacífica es muy similar a las Tierras Bajas en algunos aspectos geográficos, ya que se caracteriza por altitudes menores a los 300 m sobre el nivel del mar y originalmente estuvo cubierta por bosque tropical.
Por lo tanto su flora y fauna original ha sido muy similar a la de Petén, con la excepción de especies propias del Océano Pacífico. La planicie costera se extiende por 700 km de noroeste a sureste, iniciando en el istmo de Tehuantepec, hasta llegar a la costa occidental de El Salvador, donde llega a ser muy angosta, debido a la presencia de la Sierra del Bálsamo.
El límite norte de la Costa Pacífica está delimitado por la presencia de una cadena de más de 40 volcanes, cuya actividad ha contribuido a la alta fertilidad de sus suelos aluviales.
La ladera sur de la cadena volcánica es conocida como Bocacosta o Piedemonte, que alcanza los 1,000 m sobre el nivel del mar y se caracteriza por una elevada precipitación pluvial, que excede los 2,000 ml anuales.
Por esta razón, las principales áreas de producción de cacao se ubicaron en las zonas de Soconusco, Suchitepéquez e Izalco. En esta región también fue importante la presencia de ríos, los cuales sirvieron como fronteras territoriales. De sus recursos naturales también es relevante la presencia de manglares, lo que facilitó el asentamiento de las poblaciones más antiguas de toda el Área Maya.
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